El síndrome del corazón roto – Maite Leija

Hace algún tiempo, en una serie de televisión, de esas de casos médicos extraños, anunciaban como titulo del episodio: “El síndrome del corazón roto”, nunca imaginé que eso fuera una enfermedad real, de hecho era tal mi inquietud, que decidí buscar algo sobre el tema, en lo que recuerdo que encontré se halaba de una enfermedad que no hace mucho fue descubierta y que es provocada por un estrés físico o emocional muy fuerte, que literalmente se siente como si se rompiera el corazón, medicamente explicado tiene síntomas muy parecidos a los de un infarto, pero sin las secuelas que deja uno real.

En la vida experimentamos muchos sentimientos, entre ellos dos totalmente diferentes, que son por los que mas frecuentemente pasamos y ese es el de la alegría o felicidad y la tristeza o dolor, a todas nos toca vivirlos en muchas ocasiones, puedo decir que es imposible evitar alguno de ellos, pues los seres humanos somos así, gran parte de nosotros se conforma de sentimientos, y necesidades de afecto, comprensión, protección etc. Y estos mismos necesitan ser correspondidos, alimentados y cuidados.

A veces el pasar por momentos donde las cosas no van bien, ya sea con la pareja, familia, amistades, personas importantes para nosotras, situaciones donde los problemas abundan por uno u otro motivo, vivimos algo parecido a ese sentimiento de tener el “corazón roto”, y es que hay palabras y actitudes que hacen daño, que tal vez con o sin intención de una persona llegan a nuestra vida y “rompen nuestro corazón”, lo lastiman, le causan heridas, pero no eso quiere decir que andemos por ahí padeciendo el dolor, y mucho menos que ya que esta roto no tiene arreglo, sino que debemos dejar que Dios tome el control de las situaciones y con su amor lo repare.

Tanto es el amor de Dios que ve hasta el rincón mas escondido de tu corazón que los demás no pueden ver, sabe lo que provocó y conoce el dolor que puedes estar sintiendo, por eso es necesario que hoy dejes que tome cartas en el asunto, que se encargue de sanarlo porque Él es el único que puede hacerlo, es el único capaz de cambiar esa situación que ha mantenido con tu corazón roto o lastimado, y sabes, hoy es un buen día para pedirle que lo restaure.

La situaciones difíciles de la vida solo sirven para 2 cosas para destruir o para fortalecer, ¿Cuál de ellas escogerías? Todas pasamos por pruebas, por cosas complicadas que a veces lastiman nuestro corazón, pero es decisión propia levantarse de nuevo o dejar que nos mantengan derribadas en el suelo, tú tienes en tus manos la opción de levantarte y dejar que Dios sane y restaure completo tu corazón, y Él siempre estará dispuesto a hacerlo.

Ir por la vida cargando con tristeza, problemas y cosas que te lastiman, solo provoca que con el tiempo las heridas del corazón sean mas profundas, un corazón así no puede funcionar al 100%, porque siempre vive con el dolor presente y esos son impedimentos para el crecimiento personal pero sobre todo espiritual, porque es ahí en el corazón donde Dios habita.

Tal vez alguien ha lastimado tanto tu corazón que hoy sientes que esta roto, y has sufrido por el dolor que causan las heridas, pero esas heridas pueden ser sanadas, y tu corazón restaurado, el hecho de ser cristianas no nos garantiza que nunca sufriremos, pero si nos da la completa seguridad de que de todo, absolutamente todo, Dios nos librará porque Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas. (Salmos 147:3)

¡No vivas mas con el corazón roto, Dios tiene el poder para repararlo!

Autora: Maite Leija

Escrito para: www.mujerescristianas.org

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